Entonces ¿para qué sirve la cultura?
Tendría que definir primero a qué concepto de cultura me refiero, si al conjunto de expresiones propias de un pueblo, que comprende sus costumbres, música, comida, etc. O a la que se refieren mis amigos literatos, artistas y cinéfilos: aquella que amerita una amplia gama de conocimientos en Historia del Arte, lo mismo que haber leído desde Homero hasta Cortázar y haber visto al menos unas cuantas películas de Buñuel y de Felllini. Algunos de estos amigos suelen sentirse superiores a los que desconocen la obra de Borges o la poesía maldita de Baudelaire y desprecian a quienes dedicaron su infancia a leer los chistes de Condorito o las novelas de vaqueros. Yo misma he despotricado por la ausencia de hábitos de lectura en los jóvenes, me he burlado de los que no conocen siquiera el poema 20 de Neruda, me he sentido una especie de iluminada ante alumnos, amigos y compañeros de trabajo y me he solazado discutiendo con todos esos pedantes ilustrados. Sin embargo, ante la lamentable