Yendo hacia ti
Ansiosa voy a tu encuentro temiendo que mi cuerpo se disuelva convirtiéndose en un magma inasible al contacto con tus besos o que salga volando como una cometa sin hilo y se desoriente en el firmamento de tus caricias he deseado tanto tus manos sobre mi piel que me da miedo caer muerta y no poder sentirlas Ahora que el miedo desapareció el mundo quedó en silencio y el éxtasis que me nubla la razón, que todavía hace sentir sus réplicas por toda mi humanidad quisiera dedicarlo a mis amigas, abuelas, tías a todas aquellas que no supieron nada del placer.